Bienvenidos a mi humilde morada ;)

Nunca tuve problemas para encontrar piso en Malta porque la escuela, desde el principio, me ayudó en la búsqueda de la mejor ubicación al mejor precio. 

Debido a donde estaba ubicada la escuela, en SmartCity, decidí instalarme en Xghajra (un pueblo tranquilo y con unas playas muy bonitas).

 Como mi economía no estaba para tirar cohetes (ni está jejeje), compartí piso con dos chicas más que también asistían a los cursos en GCM. Una de ellas se convirtió en mi mejor amiga allí. Su nombre era Shayla, venía de Kazakhstan. He de decir que al principio me parecía bastante rara, muy tímida y poco sociable ya que se juntaba solamente con las otras alumnas de su país y hablaban ruso entre ellas. Pero una vez la conocí realmente, me encantó su forma de ser. La otra chica era húngara, se llamaba Gizi, rubita y muy guapa. La verdad es que estaba muy cómoda con ellas dos.

Os voy a enseñar unas fotos que hice al llegar para que se os haga más gráfica la idea jejeje.

Este era el baño, aquí nos dábamos los grances baños con espuma y nos relajábamos después de un día largo de estudio o de turisteo. Lo recuerdo con mucho cariño, era mi momento de relax del día :)

Esta era nuestra cocina. También tengo muchos buenos recuerdos aquí. Cenas en grupo con todos los amigos, mañanas de sábado que relajadas cocinábamos pancakes (tortitas) juntas y nos poníamos hasta arriba de chocolate y nata, tardes de calor en las que cogíamos los hielos del congelador y nos dedicábamos a tirárnoslos las unas a las otras (que por consiguiente después todo quedaba perdido de agua y tocaba limpiar jajaja)...

Miles de historias :)

Esta era mi habitación. Al principio dormía yo sola allí, pero así fueron pasando los días y las noches nos hicimos más y más amigas, y era la habitación más usada de la casa. Podíamos llegar a dormir hasta 4 aquí!

Esta casa me trae muchos recuerdos. Cada vez que veo nuestras fotos no paro de sonreír y rememorar ciertas historias, tanto buenas como malas, pero en el fondo todas me sirvieron para aprender. En este post quizá me esté poniendo demasiado nostálgica y por eso lo debería dejar aquí, pero si algo os digo, es que si en algún momento de vuestra vida os habéis planteado, aunque sea solo un poco, el pasar un verano fuera de casa, lo hagáis. Porque lo que os traéis de vuelta a España no es sólo el equipaje.